A esta adolescente la han castigado por haber robado unas monedas del negocio familiar, así que el encargado de darle una lección es el capataz que termina siendo un aficionado al bondage y amarra a la chica para despues darle placer con una botella, por supuesto la chica no entiende que pasa, pero eso sí, no deja de gemir de placer.
- Compartir
-

-
